miércoles, 7 de enero de 2009

El trabajo es artifacción.

El ser humano por su propia esencia percibe el tiempo a través de su dolor, el individuo en el sufrimiento padece un continuo cómputo de las tareas que ejecutan sus emociones miedosas y percepciona la secuencia de acciones que realizan las capacidades que resisten a su agresividad.

El ser humano por su propia esencia percibe y siente lo extenso espacial por la descarga de las agresividades que le produce el miedo, mediante la manipulación de los objetos que bullen a su derredor, para elaborar instrumentos, que produzcan artículos, que disipen el miedo propio y el ajeno.

El individuo trabajador agrede a lo desconocido estudiándolo y entendiéndolo.

  • El trabajador se plantea problemas a sí mismo y diseña sus soluciones.
  • El individuo trabajador, inventa instrumentos productivos o intelectivos aplicados a las soluciones proyectadas, y se entrena en su utilización.
  • El individuo operario produce artículos que le benefician restándole miedo ante sus necesidades de supervivencia.
  • El individuo trabajador aporta a los demás, los artículos que ha artificiado para el beneficio no solo propio sino ajeno, evitando y previniendo así el posible miedo que le puedan infundir los ajenos.
  • El individuo trabajador aporta a los demás los artículos que ha artificiado para el beneficio de los demás por amor y enlace a la humanidad.
  • El individuo es humano cuando trabaja investigando y elaborando porque controla, domina y resuelve sus dolores, sus miedos y sus agresividades.

Una de las tareas mas importantes del trabajador es activar sus potencias cognoscitivas para enlazar la res extensa con la Vis Creans, la fuerza que mueve al universo y entender y comunicar cosas que pertenecerán al mundo de la res communis cogitans.

  • La res cogitans individual emana de las gestalts que realiza el cerebro por prueba y error.
  • Lo único que puede ser común a la humanidad, es la res cogitata elaborada por un individuo, la cual ha sido consignada como exitosa en el ámbito comunitario.
  • La mayor garantía de éxito comunitario imperecedero es que la res cogitata individual descubra los movimientos de la Vis Creans.

El trabajo es planificar, pensar y actuar. El conjunto de estas tareas destinadas a un fin es una artifacción.

  • El individuo se deshumaniza en el ocio.
  • El individuo pierde el control de sus emociones cuando no inventa, cuando no estudia los problemas que le acometen, cuando no manipula los objetos o las herramientas con un fin resolutivo de sus miedos, cuando los artefactos que produce no le rebenefician directamente a él, cuando los artículos producidos por él benefician a muy pocos de sus semejantes.
  • Todas las potencias cognoscitivas y pensantes del ser humano se enlazan armónicamente con las facultades orgánicas corporales y sus emociones a través del trabajo.

El buen trabajador en un adecuado puesto de trabajo puede llegar a hacerse humano en el pleno sentido de la palabra y podrá emitir acciones y pensamientos verdaderos, bondadosos y hermosos, llegando incluso a disfrutar de muchos momentos de su vida.

El mal trabajador en un adecuado puesto de trabajo puede llegar a hacerse inhumano y emitirá acciones y pensamientos falsos, malévolos y grotescos, llegando incluso a detestar en muchos momentos de su vida.

El buen trabajador en un perverso puesto de trabajo puede llegar a sentirse inhumano y actuará en muchas ocasiones de forma errónea, descaminada y caricaturesca, llegando incluso a detestar en muchos momentos de su cotidiano quehacer poniendo todas sus esperanzas en el ocio.

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